Lo que más me sorprendió una vez fue una chica, que se sentó en el suelo y sólo llevaba una caja de tizas de colores. A las horas volví y pude ver algo increible. Con sus pinturas pudo engañar a mi cerebro de tal manera de poder ver realidad en un suelo.
Estoy hablando del arte 3D en la calle, ese juego increíble de la perspectiva. Son personas que tal vez no encuentren un trabajo o que en ocasiones cuando intentaron hacer algo para expresarse la gente se quejó e incluso lo denunciaran por pintar en la vía pública pero logran imágenes espectaculares y de esta manera siguen desarrollando su talento innato.
Julian Beever es uno de estos artistas tan increibles que puede lograr con muy poco cosas inimagibles.
Estas personas sí que se les puede considerar artistas sin duda alguna. Juegan con la perspectiva hasta conseguir lo quieren expresar. Hay que sacarlo de las calles y reconocerles su mérito.
Silvia Abascal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario