jueves, 14 de octubre de 2010

Arte en miniatura

Marilyn Monroe


Hace tiempo vi un reportaje sobre artistas que crean sus obras en tamaño mínimo. El escultor sobre el que trataba el texto era Williard Wigan.


Estatua de la Libertad


El artista británico es capaz de crear obras de arte sobre la cabeza de un alfiler o en el ojo de una aguja. Sus últimas obras no han superado el tamaño de una célula de sangre.



Blancanieves y los siete enanitos


Entre sus obras más famosas encontramos el David de Miguel Ángel en un grano de arena o al astronauta Buzz Aldrin en el ojo de una aguja.


David de Miguel Ángel


Cuando vemos estas obras todos pensamos que es algo imposible, que tiene que llevar meses, casi años. Williard Wigan tarda en hacer cada escultura alrededor de ocho semanas.


Buzz Aldrin

Uno de los mayores problemas para estos artistas es el pulso, de hecho entrar en un estado de meditación que son capaces de desacelerar su ritmo cardiaco.



Familia Obama

1 comentario:

Natalia Liquiñano dijo...

es un ejemplo de hipertrofia formal al que estamos poco acostumbrados... las obras artísticas que tienden al gigantismo, hacen que el observador se sienta pequeño, abrumado, desprotegido, y casi devorado... pero las miniaturas nos hacen sentirnos gigantes, incluso poderosos, nos dan la posibilidad de observar el mundo desde otra perspectiva, desde la misma que lo haría por ejemplo un dios... resulta obvia la capacidad de la escala como herramienta artística para provocar en el observador diferentes percepciones y emociones