Weblog de apoyo de la asignatura Estética y Dirección de Arte. Prof. Ángel Fernández.
miércoles, 20 de octubre de 2010
Battle Royale: gore light y arte
Hace tiempo descubrí una película que todo el que la ve reconoce que acaba con el estómago revuelto. Estoy hablando de la japonesa Battle Royale, de Kinji Fukasaku. Ésta película, basada en una novela, trata de una clase de instituto que es seleccionada y trasladada a una isla por el Gobierno para aplicar la Ley de Reforma Educativa del Milenio: solo debe quedar uno. Cada alumno recibe un arma y no tienen más remedio que jugar. Esta medida implantada por el gobierno responde al hecho de que los adolescentes japoneses comienzan a tener el poder y el país necesita minimizar el problema. ¿Qué mejor forma que dejando a los alumnos que se maten entre ellos?
Éste film, como todos tiene muchos fans, pero también muchos detractores. Hay quién la llama obra de arte y como tal, debe perdurar. Otros se quejan de que es un impulso más hacia la violencia para los adolescentes, cómo pueden ser los videojuegos o el manga. Es cierto que desde el principio llama la atención y te obliga a no apartar la vista de la pantalla. Es una película capaz de hacer disfrutar y divertir al espectador con un gore light. Esta obra en una obra de culto en Japón, tanto por lo que trata como por su mensaje.
La película fue culpada de una serie de actos violentos que sucedieron en Japón al poco tiempo de estrenarse. El director, Fukasaku, explicó en entrevistas posteriores que el argumento le recordaba a la Segunda Guerra Mundial y a cómo el Gobierno japonés había ocultado información, de ahí su desconfianza hacia los adultos. Con esta creación les lanza un mensaje a los adolescentes que la vean, les dice que se lo pueden tomar de dos formas: como un consejo o como una advertencia.
A mí personalmente como largometraje me gustó, me pareció algo original, fuera de lo normal, pero a la vez demasiado fuerte y hace que te plantees tu vida si estuvieses en esa misma situación. Cuando acaba la película te planteas si el asesinato es un delito, un pecado o simplemente un instinto. ¿Qué harías tú si te dan a elegir entre matar o morir? ¿Y si un compañero tuyo te apuntase con una pistola? ¿O si un amigo mata a tu pareja frente a ti?
Os invito a ver la película y que vosotros mismos creéis vuestra opinión.
Ana Cubo
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